Capítulo 27 - "Malos Momentos"

MARATOON PARTE 1

Suspiré profundamente y le aparté la mirada.

Elena: Te dije que no quería decirte nada, ha sido culpa tuya. ¿Has acabado?

Michael no decía nada, seguía mirándome y asintió con la cabeza.

Elena: Bien. ¡¡La cuenta por favor!! Quiero irme de aquí.

La camarera llegó con la cuenta y la dejo encima de la mesa. Saqué mi cartera pero Michael fue más rápido que yo.

Michael: No puedo permitir que una señorita invite a un caballero, y mucho menos si ese caballero soy yo.

Elena: Muy cortes.

Me levanté y salí disparada de la cafetería, Michael venía detrás de mi.

Michael: Elena! Espera! No vayas tan rápido!

Elena: Quiero irme a casa, ya he tenido un día bastante malo hoy.
Michael: Elena...
Elena: No, vale que no quieras venir al baile conmigo pero por lo menos podrías haber hablado conmigo en vez de mirarme como si estuviera loca.
Michael: Yo...

Le interrumpí.

Elena: Dejalo, es verdad, estoy loca. Cómo voy a aparecer por el baile con Michael Jackson, verdad?

Michael: No, para nada es así...escucharme.
Elena: Todas las personas que me han pedido hoy que las escuche han acabado haciéndome llorar, así que ahorratelo. No quiero secarme por dentro.

Menos mal que la cafetería estaba cerca del parque -.- llegamos a donde estaba mi bicicleta tirada, me monté y empecé a pedalear. Pero la rueda no funcionó bien y me caí de bruces a menos de un metro de donde estaba Michael.

Elena: Oh genial. Maravilloso. El día mejora por momentos.

Michael: Estas bien?
Elena: Si tranquilo, es que tenía una cita con el suelo.
Micchael: Te hablo enserio, estas bien?
Elena: Tú como crees que estoy Michael?

Me levanté y me sacudí la ropa, me había hecho un agujero en el pantalón y estaba sangrando...

Michael se arrodillo delante de mi.

Michael: Dejame que te vea esa rodilla...

Elena: Mi rodilla esta perfectamente, es solo un rasguño.
Michael: Bueno, entonces dejame que te la limpie...
Elena: Puedo ducharme ahora, no pasa nada.
Michael: Por favor.
Elena: Que no.
Michael: Esta bien, como quieras.

Mientras se levantaba puso su hombro en mi estomago y hizo fuerza hacía arriba. De modo que medio cuerpo se me quedó mirando al suelo.

Elena: Michael bajame!!No me gusta tener tu culo en la caraa!! D:

Michael: Oye hermosa, yo también tengo tu enorme trasero al lado de mi cara y no te digo nada.
Elena: Enorme que?!?! Y tú eres el caballero??
Michael: Si, pero no me gusta que se metan con mi culo.
Elena: Michael, bajame, peso mucho. Lo digo enserio.
Michael: No pesas nada, concentrate en respirar.
Elena: Se me esta subiendo la sangre a la cabeza.

Me bajó pero me agarró del brazo para que no pudiera escaparme.

Michael: Tal vez esto te escueza un poco.

Empezó a echarme agua por la rodilla y vaya que si escocía...pero soporté el dolor. No me iba a poner a gritar como una niña...      

Michael: Aguantas bien eh.

Elena: Será la costumbre.
Michael: Bueno, yo creo que ya esta. Mejor?
Elena: Igual que antes. Ahora vas a soplarme la herida y ha ponerme una curita de elefantes y gorilas? O me puedo ir ya?

Michael suspiró, le estaba sacando un poco de quicio...

Michael: Y como vas a volver? Puedes montar otra vez en esa bicicleta rota y ir cayéndote cada dos por tres o puedes dejar que te acompañe.

Elena: O también puedo llevarme la bicicleta y ir andando.
Michael: También, pero me gustaría acompañarte.
Elena: A mi también me gustarían muchas cosas que no pueden ser señorito Jackson.

Me di la vuelta y volví a por mi bici, la levanté del suelo, la maldije y empecé a andar otra vez. Pero no íbamos solos.

Michael: Y ya esta? No me vas a dejar hablar contigo ni nada?

Elena: Mira Michael, ya he tenido bastante contacto humano por hoy. Quiero estar sola con mi bici.
Michael: Pero...
Elena: Pero nada, gracias por el batido y por curarme.
Michael: Y por despertarte?
Elena: Por eso no, hoy es uno de esos día en el que deseas quedarte dormida y no despertar hasta que este todo solucionado...
Michael: Tu padre va a seguir estando estés despierta o dormida. Así solo conseguirías que pasara el tiempo.
Elena: Algo es algo, no?
Michael: No, hay que enfrentarse a los problemas. Y cuanto antes mejor.
Elena: Por eso preferiste decirme lo de tu relación con Broke Shields justo en el último momento? O eso era porque no encontrabas las palabras?

Michael no contestó.

Elena: Lo que me temía.

Apareció un coche que se paro justo al lado de Michael.

Señor: Señor Jackson, monte en el coche, le llevaremos a casa.

Michael: Si, un momento. Elena, te llevo?
Elena: No gracias, conozco el camino y me apetece andar.
Michael: Venga anda, no nos cuesta nada...
Elena: Michael, ya he tenido una dosis suficiente de caballerosidad por tu parte, no necesito más. Gracias.
Michael: Esta bien...

Michael se montó en el coche y arrancaron. A pocos segundos el coche ya había desaparecido de mi vista. Comprobé que estaba sola en la calle y me agaché ante la rueda rota de mi bici. Una miradíta por aquí, una varilla por allá, una bruja que se harta y no encuentra el problema...Un chasquido de dedos y listo. La rueda volvió a su normalidad y yo volví a subirme. Una vez más y seguramente por última vez en mucho tiempo empecé a pedalear hasta llegar a mi barrio. Me bajé de la bici unos metros más lejos, por si las moscas, ya sabéis y llevé la bicicleta en una sola rueda hasta donde la había dejado. Así aunque estuviera arreglada parecería que seguía rota.

Entre a casa y cerré la puerta. Mi madre salió corriendo de la cocina, parecía preocupada y se estaba secando las manos con un trapo.

Cristina: Elena! Por las barbas de Merlín hija, me tenías preocupada!! Lucas me ha dicho que habéis discutido y que te habías ido! A partir de ahí la tarde ha sido una verdadera pesadilla.

Me abrazó.

Elena: Estoy bien mamá, no tenías porque preocuparte.

Cristina: Como que no? Lo último que quiero en esta vida es perderte cariño.
Elena: He estado en las mejores manos mamá :)
Cristina: Enserio? Pues tus pantalones no dicen lo mismo...Que ha pasado?

Le conté todo lo que había pasado mientras subíamos a mi cuarto, tenía que prepararlo todo para mi ducha, la necesitaba demasiado...

Cristina: No has sido demasiado dura con Michael?

Elena: Ahora que lo pienso tal vez si, pero en ese momento estaba shockeada mamá...Me había rechazado!
Cristina: Pero bueno, si no le has dejado hablar ¿cómo iba a explicar algo el pobre muchacho?
Elena: No lo se mamá! No lo había pensado! Ahora solo quiero ducharme y ya esta, vale?

Se acercó a mi y me acarició el brazo.

Cristina: Creo que tu más que una ducha necesitas un baño. Tienes la bañera ya preparada, con agua templada y mucha espuma.

Elena: (Suspiré) Muchisimas gracias mamá, eres la mejor sin duda.
Cristina: No ha sido nada cielo, ahora relajate y estate todo el tiempo que quieras :) Solo que cuando veas que tus dedos empiezan a arrugarse o que estés encogiendo salte...No quiero tener que ser yo la que tenga que escurrirte como una fregona...

Reí.

Elena: Esta bien, tendré cuidado :)

Dí un beso a mi madre y me metí al baño. Si que se había encargado de preparar un baño en condiciones...le había puesto velas y todo *-* Me quité toda la ropa y me metí dentro del agua. 1..2..3 me sumergí dentro y esperé otros tres segundos. 1..2..3 y una vez más lo mismo, así tres veces. Y cuando  no quedaba ni una sola parte de mi pelo que no estuviera mojada apoyé el cuello en el borde de la bañera y puse la mente en blanco. El mejor momento del día, sin ninguna duda...

***: HOLA!!

Abrí los ojos de golpe y me incorporé, estaba realmente asustada. No me lo esperaba!! Pero era mi gato -.-

Bruno: Vaya, ya no me acordaba de lo que se sentía cuando asustabas a alguien así e.e

Elena: Eres un estúpido Bruno!
Bruno: Y tampoco es la primera vez que me insultan cuando doi un susto así ._.
Elena: Lo siento, es que me has asustado mucho -.-
Bruno: Ya lo se, lo siento e.e Solo quería darte un infarto, no que te murieras.
Elena: Vaya, gracias por la parte que me toca.
Bruno: De nada, a todo esto. Tu abuela dice que la cena ya esta lista.
Elena: No tengo hambre Bruno, hoy no he tenido un buen día...
 
El agua de la bañera empezó a agitarse y de repente un patito de goma salió volando por los aires tenia un papelito atado con una cuerda.

Bruno: Ai madre!! Parece que los métodos de mensajería cada vez se están modernizando más...

Elena: Eso y que yo no gano para sustos...

Quité la nota del patito: “No podemos dejar esto así.”

Bruno: Y bien? Que dice el patito?
Elena: Que es un payaso en todos los sentidos.
Bruno: Vaya, si que es un patito interesante...
Elena: Pues si, muy interesante, pero no del todo sincero.

1..2..3 y me volví a sumergir, esta vez todo lo malo se iría con el agua. Y así fue, pero todos sabemos que deshacerse de las cosas es difícil, muy difícil. Note mucha presión, como si alguien hubiera puesto una tapa de cristal en la bañera haciendo que todo el agua se amoldase a una sola forma. Abrí los ojos y intente incorporarme pero no podía, veía la luz del baño como algo lejano. De repente parecía como si hubiera retrocedido 10 años en el tiempo, estaba en un parque verde lleno de columpios, era el parque donde estaba hace unos días con Michael, el parque abandonado. Yo estaba con mi padre jugando y riéndome. Ese día recuerdo que me caí y mi padre vino corriendo a donde mí como si me hubiera roto un brazo. Yo no paraba de llorar, él se agachó a donde estaba, me sopló la herida, luego me agarro en sus brazos y me llevó a un camión que vendía helados y me compro uno de mi sabor favorito, dejé de llorar de inmediato, desde entonces no paraba de reírme.

Luego la imagen cambió y estaba en mi habitación durmiendo, oí un ruido muy estruendoso fuera y luego otros ruidos provenientes de la cocina, como un llanto. Me bajé de la cama y fui a la cocina, era mi madre que estaba llorando y mi abuela no paraba de repetirla: “Las cosas son así Cristina, no se puede hacer nada más y no puedes decirles nada a tus hijos.” y luego mis hermanos aparecieron por detrás y me dijeron que todo estaba bien, que me volviera a la cama. Esa era la última vez que vi a mi padre. 
 ...Finalmente la imagen se volvió negra...